jueves, 21 de enero de 2010

Secreto compartido

Me cogiste las manos, y nos sentamos al filo de tu cama.

- "Tengo que contarte algo, pero debes prometerme que me vas a apoyar" - dijiste con cierto nerviosismo.

Respondí, imaginándome de que se trataba:

- "Claro, sabes que te quiero, que puedes confiar en mi, y te voy a apoyar en todo".

Seguidamente, me confesaste tu secreto. Por unos instantes, quedé paralizada, sin saber que decir, sin saber que hacer, si llorar o reir, porque aunque llevaba días sospechándolo, nunca pensé que llegaría el momento en que me lo confesarías. Sin saber por qué, las dos comenzamos a llorar abrazadas. Sentía alegria, felicidad, satisfacción, pero a la vez, miedo, por como reaccionarían los demás, ya que tu secreto se desvelaría tarde o temprano.

Pero al poco tiempo, y poco a poco, tuviste el valor de contarle a todos ese gran secreto, sin importarte lo que pensara la gente, con cierto temor por como se lo tomarían nuestros seres mas queridos, pero con esa fuerza y valentía que has tenido siempre para enfrentarte a tus problemas.

Me siento orgullosa de tí, porque siento que tú, más que nadie en este mundo, mereces ser feliz.

5 comentarios:

  1. Dentro de ese temor que mencionas, siempre hay que tener una pizca de esperanza, confianza, ilusión por ser feliz,... una vez que consigas vencer al temor, vendrá tu felicidad.

    No tengo nada más que decir, simplemente GRACIAS HERMANA.

    ResponderEliminar
  2. q bonitoooo!! me ha encantadooo!!!
    besitos
    salma

    ResponderEliminar
  3. Joder,tia (por no decirte otra cosa). Se me acaban de caer dos lagrimones que van a inundar mi cuarto. Os quiero mucho a las dos.
    Besos
    Tu prima Anita.

    ResponderEliminar